Hoy queremos abordar un tema, que desde Manava consideramos fundamental conocer:  Los primeros indicios de la enfermedad de Alzheimer.

En los últimos 10 años se ha avanzado mucho científicamente, sobre todo en el diagnóstico, mecanismos patogénicos y nuevos focos de terapia, temas que desde este blog trataremos y analizaremos.

Pero hoy queremos que tengáis toda la información sobre los primeros síntomas, pues si una cosa está clara es que un diagnóstico precoz es importantísimo para frenar y estabilizar la enfermedad el máximo tiempo posible. Además sabemos que cuando el Alzheimer se manifiesta clínicamente, el paciente puede llevar décadas con el proceso degenerativo en su cerebro.

 

Lo primero de todo es entender que el olvido ocasional nos sucede a todos y no tiene importancia, sin embargo existen otros síntomas que sí deben tenerse en cuenta:

 

Pérdida de memoria: Olvidos de fecha, de citas, “¿quién vino a verme ayer?” “¿qué he comido hoy?”, siempre de actos o hechos recientes.

Reiteración en determinadas preguntas, aunque la respuesta ya haya sido dada: “¿qué hora es?”, “¿cuándo nos vamos a casa?”, ¿cuándo viene mi madre?”, siempre repetitivo como si la respuesta no hubiera sido dada, aunque se le haya respondido varias veces.

Dificultad al nombrar objetos de uso muy habitual; se suele recordar la función pero no el nombre: “Dame el….eso para comer, ¡no me acuerdo como se llama!”. Olvidar que se llama “tenedor” pero saber que sirve para comer, sabe qué es un peine pero ha olvidado como peinarse.

Dificultad en realizar tareas simples que antes no existía: Le resulta mucho más complicado realizar una gestión bancaria, dificultad para conseguir realizar una llamada, si ha sido una persona que ha llevado las cuentas familiares dificultades que le hacen abandonar esta tarea…

Dificultad en realizar gestos simples y conocidos por su uso habitual: abrir con llave una puerta, encender una cerilla, parar un táxi.

Disminución del sentido de la orientación respecto al tiempo y lugarperderse en el barrio cuando va a realizar la compra en los establecimientos dónde la ha realizado habitualmente, preguntar por el día que es…

Pérdida de interés y motivación por seguir realizando tareas simples con las que antes disfrutaba : leer el periódico, reuniones sociales con sus amigos, ver su programa favorito de Tv. Las tareas se abandonan porque sin motivo aparente su dificultad incrementa y la frustración lleva al abandono.

Cambios bruscos de humor: se pone de mal humor, furioso, irascible, sin motivo ni solución.

 

 

No olvidéis que estos síntomas son característicos del Alzheimer pero deben ser valorados por un especialista. No dudéis en acudir a su consulta si tenéis dudas.

Un diagnóstico precoz y el tratamiento por parte de personal especializado marcan la diferencia a la hora de estabilizar al enfermo de Alzheimer y así facilitarle la mejor calidad de vida posible.

 

 

 

Post escrito por Teresa Lorenzo.

 

 

 

 

Fuente de información: Fundación Alzheimer España